Felinos ojos, que no impiden ver sus lujuriosos andares,
pero que hipnotizan en cuanto te sumerges en sus secretos.
Unos ojos claros que devuelven tu reflejo con notas de sueños,
una piel suave y cálida para perderse buscando sus mayores secretos.
Graciosa mirada infantil atrapada el tiempo.
Inocencia y picardía, dulzura y vicio.
Reunidas en maravilloso acuerdo
provocan una mezcla de instintos y deseos.
Cuerpo de diosa simplemente porque es tuyo
no existió Afrodita más bella.
Miau!
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